El actual presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, ve como el partido que le nominó, Die Grünen (DG, Los Verdes), no tendrá escaños en el parlamento austriaco.

Sozialdemokratische Partei Österreichs (SPÖ, Partido Socialdemócrata de Austria, inscrito en el PS Europeo) pierde el primer puesto en las elecciones legislativas celebradas el pasado domingo 15 de octubre de 2017. Con una participación algo superior a las últimas de 2013 (70% frente al 67,8% anterior) los austriacos han votado mayoritariamente a dos partidos de la derecha, el democristiano Österreichische Volkspartei (ÖVP, Partido Popular Austríaco, afiliado al PP Europeo, que estos años ha estado en el gobierno coaligado con el SPÖ) y el filofascista Freiheitliche Partei Österreichs (FPÖ, Partido de la Libertad de Austria, del Movimiento Europa de las Naciones y de las Libertades). Aunque es previsible que se mantenga, en el Nationalrat (Consejo Nacional de Austria), la coalición de socialdemócratas y democristianos… o tal vez no.

Recordemos dos cosas: el ascenso del fascismo en Austria es claro, en las últimas elecciones a Presidente de la República, Alexander Van der Bellen ganó por la mínima (y en una segunda vuelta que se tuvo que repetir) a Norbert Hofer, del FPÖ, quien había ganado la primera vuelta con diferencia (aunque lejos del 50%). ÖVP viene gobernando o en coalición de gobierno en Austria desde el 86, siendo la segunda pata del gobierno desde Alfred Gusenbauer (2007). Junto con esto, cabe decir que el FPÖ tampoco es extraño al gobierno austriaco, ha formado parte de coaliciones en 2000 a 2005 con el ÖVP, pero también con el SPÖ (1983-1986).

El SPÖ, como pueden ver, mantiene más o menos los mismos votantes (y los mismos 52 escaños), un problema cuando son los otros los que crecen. ÖVP sube 14 escaños (gracias a un aumento de 7,6 puntos que le colocan primero con el 31,5%), dejando claro que el próximo canciller será Sebastian Kurz (actual ministro de exteriores y, por lo demás, un hombre con un discurso antiinmigrantes muy fuerte); como segundo partido se colocan los neofascistas del FPÖ con 53 escaños, uno más que los socialdemócratas (y 13 más que en los anteriores comicios). Sorprende ver que Los Verdes (DG) se caen por completo, quedando por debajo del 4% no optienen escaños, con lo que pasan de 24 a ninguno.

Das Neue Österreich und Liberales Forum (NEOS, La Nueva Austria y Foro Liberal, parte de la Alianza de los Liberales europea, como Ciudadanos) mantiene 9 escaños mejorando un poco su resultado. Peter Pilz, antiguo destacado de DG, fundó su propio partido (Liste Peter Pilz) con el que ha obtenido el acceso al parlamento con el 4,1% de votos, consiguiendo 8 escaños.